El PP cifra en 800.000 euros el coste de una estación de autobuses cerrada dos años

El grupo municipal popular calculó el martes en 799.000 euros el coste de mantener cerrada la nueva estación de autobuses durante los últimos dos años, «cifra a la que habría que añadir la consecuencia negativa para los ciudadanos de no poder disponer de la nueva infraestructura de transporte».

El concejal del PP, Ángel Sáinz Yangüela, se fijó ayer en los efectos de la clausura y mencionó, primero, la pérdida del período de garantía de los equipamientos y de las propias obras. El 30 de octubre, que se cumplen dos años desde la recepción de las obras y la estación seguirá cerrada, se habrán perdido 26.105 euros, señaló.

En lo que tiene que ver con el contrato de suministro eléctrico y sus gastos, apunta que «lo que sí está en pleno funcionamiento es el sistema antiincendios, que representa 47 de los 358 KW de potencia instalada. Su importe asciende a 22.000 euros al año, 44.000 en dos años».

Un informe técnico estima en 8.100 euros al año el importe de los seguros, tributos, etc., por lo que serían 16.200 euros en los dos años.

Además, la amortización de las obras de la estación se reparten en 50 años y, la del mobiliario y equipamiento, en 15 años, de forma que, del primer concepto, se desprende una cuantía de 392.720 euros y, del segundo, 102.889 euros.

El concejal popular añadió que existe una partida no cuantificada para las revisiones y controles del gran número de equipos e instalaciones existentes en la estación.

Por fin, el edil recordó que el pleno de junio aprobó un expediente de suplemento de crédito por 218.000 euros para la indemnización por daños y perjuicios que el aumento en el plazo de ejecución de la obra ha generado por el incremento de los costes indirectos.

«Una vez más se demuestra que la gestión de la ciudad de Logroño le queda muy grande a Hermoso de Mendoza», esgrimió el concejal del PP, para recordar después que un recurso ha paralizado la licitación del contrato de gestión de la estación de autobuses, «un nuevo retraso a lo que se suma la ausencia de ofertas al proceso de contratación que obligará al Ejecutivo local a redactar un nuevo pliego si siguen optando por la gestión indirecta de la infraestructura», manifestó Ángel Sáinz.