La ayuda que alimenta la esperanza de los más necesitados

Francisco fue uno de los primeros donantes en el hipermercado Carrefour de Logroño en la jornada de este viernes. «Es el momento de participar, ayudar a la gente que lo necesita», explicó tras dejar unos paquetes de pasta, legumbres, galletas y leche. «Siempre lo hago», añadió Francisco. Y es que este fin de semana se celebra la XII Gran Recogida del Banco de Alimentos de La Rioja, en el que 65 establecimientos de diez municipios de toda la región (36 en Logroño) colaboran cediendo espacios para la donación, por parte de sus clientes, de productos o de dinero que se invertirá en la compra de alimentación.

Para organizar todo 1.500 voluntarios ayudan en los diferentes supermercados, si bien la institución subrayó este viernes que quedan unos 50 puestos (3 horas) por cubrir en Logroño, 30 en La Rioja Alta y 15 en La Rioja Baja. El récord de alimentos recogidos se estableció en 2017 con 171.830 kilos, aunque en el 2020, solo recogiendo donaciones económicas (381.803 euros), se pudieron adquirir 310.408. El año pasado, ya con una fórmula mixta de donación económica y en especie se recogieron 138.731 kilos.

«La Rioja tiene un índice de pobreza material severa entorno al 6,7%, lo que significa que hay personas que no tienen cubiertas sus necesidades básicas, incluida una alimentación digna», advirtió Juan Carlos Fernández Ferraces, presidente del Banco de Alimentos de La Rioja, que asiste a 10.800 personas. «Un dato muy dramático es que esas cifras se están cronificando en los últimos cinco años», añadió Juan Carlos Fernández Ferraces, desvelando que el año pasado su institución repartió 1.372.000 kilos de alimentos entre esos riojanos necesitados. «Rogamos encarecidamente la regla de oro: productos no perecederos de las familias básicas. Tenemos que pensar en que estos productos van a ser distribuidos a lo largo de los siguientes meses», añadió.

Daniel Barrón, presidente de la Federación de Peñas de Logroño y padrino de la campaña, cuyo lema es ‘Tu ayuda alimenta la esperanza’, reconoció que «no solo somos festejos, a lo largo de todo el año realizamos otro tipo de actividades más sociales como puede ser esta, en la que nos quisimos ver reflejados».

También se vio reflejada Emma, quien, en Carrefour, donó pasta, leche, garbanzos, galletas… «Me parece lógico donar, al margen de que tengo seis ONG, a Valencia también he mandado… Nos tenemos que acordar de quienes tienen problemas en estos momentos», expuso Emma.

Sandra entregó botes de legumbres y galletas en el supermercado Alcampo de la calle La Cigüeña porque «a la gente le hace falta y a mí también un día me puede hacer falta, hay que ser solidario con la gente y siempre que están los voluntarios dono alguna cosa». Y Santos, en el BM de Duquesa de la Victoria, aportó un bote de garbanzos. «¡Y el más caro! El mejor. Doy el que yo comería. Hay personas que lo necesitan y tenemos que ayudar. Me parece muy positivo, ojalá funcione esto bien», deseó Santos.

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