Enric Gardiner
Martes, 19 de noviembre 2024
La carrera de Nadal toda a su fin, pero su leyenda permanecerá para siempre. El balear se despidió en Málaga tras dos décadas de gestas deportivas, con un palmarés prácticamente indescriptible y el sello especial en su manera de ganar y conquistar tantos y tantos trofeos, pero también de perder, como sucedió en su último encuentro como tenista profesional.
«Me retiro del tenis profesional pero sigo estando aquí, espero ser un buen embajador para el tenis. Es lo que he intentado toda mi vida, esforzarme para ser mejor y cumplir objetivos. He intentado hacerlo desde el respeto y la humildad, y valorar todas las cosas buenas que me han ido pasando. He intentado ser buena persona, espero que así lo hayáis percibido», aseguró ante el público del Martín Carpena, en un sencillo pero sentido acto de homenaje tras el inesperado KO de España en la Copa Davis.
«Me voy de este mundo del tenis profesional sintiendo que he encontrado muchos amigos en el camino, tanta gente a la que agradecer muchas cosas, torneos… Es difícil acordarme de todos. Me voy con la tranquilidad de que he dejado un legado como realmente lo siento, no solo deportivo, sino también personal. Entiendo que el cariño que recibo no sería el mismo si solo fuese por lo que hay en la pista», analizó muy acertadamente, pues su leyenda como deportista va mucho más allá de las pistas y entronca con el mundo de los valores personales.
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Un sinfín de leyendas del tenis en particular y del deporte en general desfilaron por las pantallas del Martín Carpena para acompañar a Nadal en su última noche como profesional. Federer, Djokovic y Murray, rivales dentro de la pista que agigantaron su leyenda, y también Iniesta, Casillas, Rodri, Beckham, Serena Williams o Conchita Martínez tuvieron palabras de cariño para el balear, profundamente emocionado, como también lo estaban su padre, su esposa y su hermana, todos ellos en las gradas del Martín Carpena.
«Tengo que dar las gracias a mucha gente. Empezaré por los que están hoy aquí. Gracias a todos vosotros, el público. Son 20 años, buenos malos. He podido vivir con todos vosotros, quiero generalizar mi agradecimiento a toda España y al mundo general. Me he sentido super afortunado por sentir tanto cariño por todo el mundo, especialmente en España», lanzó en un guiño a esa afición española que lo adora. Posteriormente, también tuvo palabras de agradecimiento a la prensa, los organizadores y especialmente, no podía ser de otra manera, a los suyos, los más cercanos, los que le han acompañado en estas dos décadas vertiginosas y le han dotado de una personalidad única.
El paso del tiempo, ese factor inexorable incluso para los más grandes, ha provocado el adiós del deportista español más grande de todos los tiempos. «El cuerpo me ha dicho que no quiere jugar más al tenis y hay que aceptarlo. Soy un privilegiado. He podido hacer de mis pasatiempo mi profesión. Soy un afortunado. Mi familia, mi equipo, mis amigos. Soy una persona que cree en la continuidad, creo en mantener a la gente que quiere y que hace que tu vida sea mejor. He mantenido a mi familia cercana. Sin vosotros esto no hubiera sido posible», finalizó. El tenista se retira, pero su leyenda permanece.
Enlace de origen : Nadal: «Me voy con la tranquilidad de haber dejado un legado»