Una despedida digna

La UD Logroñés ha descendido por méritos propios y el Numancia tirara la moneda en el último encuentro para ver si sale cara, permanencia, o cruz, descenso, pero ambos están donde están por lo que han ofrecido. La UD Logroñés puso en liza a sus supuestos ‘jugones’, pero sus carencias defensivas son notables y las ofensivas ilimitadas, Jugó Schutte, pero como si no lo hubiera hecho. Cierto es que la sala de máquinas carece de motor. Ni Ramos ni Boniquet. Ni destruir ni construir. Nada.

Esas carencias defensivas permitieron al exblanquirrojo Gorka Pérez disparar desde el punto de penalti. El balón acabó en saque de esquina, como minutos después, pero a remate de Mesa, que dejó en evidencia a Markel y a David. Daza evitó el gol. El sevillano es uno de los jugadores que se merecía minutos en el primer equipo, aunque no en esta situación. Tiene contrato, 21 años y todo apunta que el año que viene será el guardameta titular en Segunda.

José María Martínez Glera

21:33 (hace 11 minutos)

para mí

UD Logroñés: Daza, Sergi, Markel, David (Codina, 78), Vergés, Doncel (Doncel, 78), Boniquet (Algarra, 59), Ramos, Iñaki, Keita (Pichín, 55) y Schutte (Mendes, 59)

Numancia: Ayesa, Valin, Fer Román (Simic, 32), Gorka, Pol, Muñoz, Toni Arranz, Cotán (Bonaldo, 68), Carrillo (Tamayo, 84), Mancebo (Dani Sánchez, 84), Mesa (Mario Barco, 68)

Árbitro: Pozueta Rodríguez. Amonestó a los locales Boniquet, Vergés y Mendes; y a los visitantes Ayesa y Mario Barco.

Goles: 1-0, m. 78, Mendes de penalti

Incidencias: Trigésimo séptima jornada de Liga. Última en Las Gaunas. 1.633 espectadores, con presencia de seguidores del Numancia.

Avanzaba el partido. El Numancia no daba ese paso adelante definitivo por miedo a encajar un gol. Quizá no había revisado los números locales. Keita alcanzó el área, pero una vez dentro se dejó el balón entre bicicletas y el acoso de Román; Doncel fue el siguiente en aparecer a respuesta de un balón largo de Iñaki a la espalda de los centrales, pero ni siquiera conecto con él. Sí lo hizo al filo del descanso, en el que buscó la escuadra derecha numantina, pero Ayesa, adelantado, despejó el cuero. Fueron esos los mejores momentos locales antes del descanso, en los que Iñaki apareció también por el área. Incluso Schutte acarició el gol a balón parado, con un testarazo en el primer palo.

La UD Logroñés tenía cuarenta y cinco minutos para al menos agradecer con una victoria a su afición su apoyo a lo largo de la temporada. Al Numancia parecía servirle el empate. Querer empatar es un peligro, porque puedes perder. Pensó que no era mal resultado porque tenía tres puntos de renta sobre el descenso. No asumió riesgos Pablo Ayuso, tercer inquilino del banquillo. Fortaleció la medular con Bonaldo y el ataque con el calagurritano Mario Barco. Este pudo celebrar una pena máxima en el mano a mano con Daza, pero el portero tocó balón. Minutos antes de su incorporación, Ramos había buscado la escuadra izquierda. Golpeó más estético que efectivo. Ayesa blocó el esférico.

Si celebró, sin embargo, la pena máxima la UD Logroñés. El partido era más abierto, con más espacios. Si Ayuso había cambiado a sus piezas ofensivas, también Sergio Rodríguez, que puso en escena a Pichín, Mendes y Algarra. El canario corrió al espacio y entró en el área en pugna con Gorka Pérez. El vasco le agarró en el regate y el colegiado no dudó. Once metros. Mendes engañó a Ayuso y marcó.

El gol desorientó al Numancia y aupó a la UD Logroñés. Codina, recién incorporado al campo, se quedó a centímetros del gol. Ayesa lo evitó sobre la raya de gol. El compromiso estaba decidido. Una victoria para cerrar el año que no sirve para nada. Curioso, comenzó su andadura en Las Gaunas con derrota. Lo dicho, todo al revés.